Fuego into my body. Una de las frases más famosas de Rafa Méndez (y explotada en APM?) no se en que contexto fue dicha, la verdad. Pero creo que es una buena forma de ocurrir algo que siempre me pasa en verano... ¡Mis manos arden en verano!
Ésto es algo que lleva ocurriendo desde pequeña y que había aceptado porque mi madre también es así. Recuerdo esos veranos sentada en el sofá y con un dolor terrible de manos. Iba cada dos por tres a lavarlas porque no aguantaba desprender tanto calor. Además, me resultaba muy incómodo escribir (llegaba un punto en el que mis manos sudaban) y hacer punto ya ni te cuento.
Ahora es un tema que sigue sin preocuparme, la verdad, pero como Gabi siempre se queja y para mí es muy incómodo no poder darle la mano a mi novio he querido dedicarle un post. Él ha llegado a la conclusión de que es un efecto mutante y que debería formar parte de X-Men (...). En fin, sin comentarios.
Así que, aparte de tener dermatitis atópica, tengo unas manos que arden durante el verano (y parte de la primavera y otoño). Un pack muy curioso porque no puedo mojarme las manos para refrescarme (el agua provoca que se seque la piel) y si me pongo crema noto las manos ardiendo y pringosas.
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