Madrid (05/03 - 07/03)

Desde el viernes hasta el lunes me fui de viaje con mi pareja a Madrid, ya que he tenido vacaciones en mi trabajo.

El viernes no pudimos hacer nada porque el vuelo se retraso. Fue llegar e irnos directamente a cenar y a dormir.

El sábado visitamos por la mañana El Escorial. El camino hacia allí era de prácticamente 1 hora (o mas). Al llegar nos encontramos con que todo estaba nevado. Fue un inconveniente, ya que hacia mucho frío pero las vistas hacia El Escorial eran tan bonitas... Visitamos durante toda la mañana el lugar. Nos quedamos con las ganas de visitar el Valle de los caídos, pero no nos daba tiempo (por la tarde queríamos visitar el Museo del Prado). La verdad es que El Escorial fue la visita que mas me gusto de todas. Quizás se deba a que me encanta la dinastía Austria española. Mis reyes favoritos son Felipe II y Carlos II. Al caminar por El Escorial me sentí como si formase parte de aquella época. Me habría gustado poder estar mas rato para escuchar lo que decía la Audioguia y comprar algún libro.

Por la tarde fuimos al Museo del Prado, donde visitamos durante 2 horas y de manera ultra rápida la exposición permanente. De 6 a 8 de la tarde la entrada es gratuita, así que aprovechamos para visitarlo. Me pareció una verdadera lastima verlo tan deprisa todo y no poder escuchar bien la audioguia. Es uno de los lugares a los que tengo que volver y visitar. Por supuesto, las obras mas famosas del museo las conseguí ver. Pero me fui con mal sabor de boca al ver que no se podían hacer fotos en su interior (en el Louvre si que se podía).

Por la noche nos fuimos a visitar Chueca. La verdad es que me pareció un lugar lleno de vida. Me habría gustado irme a tomar algo, pero íbamos tan cansados que decidimos volver al hotel después de cenar.

El domingo fuimos por la mañana al Palacio Real. Tuvimos que hacer una cola bastante para verlo todo muy deprisa (ya que cerraban a las 2 de la tarde). ¡En general, el Palacio Real me pareció precioso! Era un poco pequeño, comparado con El Escorial, pero mantiene la elegancia de la realeza.

La visita se divide en tres partes: el palacio, la farmacia y la real armería. La parte que menos me gusto fue la farmacia. El palacio y la real armería me parecieron preciosos. Yo creía que la real armería no me iba a gustar, pero al ver que estaban las armaduras de Carlos V y Felipe II, el tema me intereso mas. Ademas, me permití el pequeño lujo de comprar unos sellos de los monarcas españoles!

Por la tarde fuimos al Museo Thyssen-Bornemisza. Este museo contiene obras de todas las épocas. La ultima parte del museo no me gusta, ya que contiene arte contemporáneo. No estoy diciendo que no merezca la pena, pero para una persona como yo que no lo comprende y no le agrada, es normal que lo pasara por alto (ademas, estábamos agotados).

Por la noche, con tiempo de sobras, fuimos al aeropuerto para regresar a nuestra ciudad. Suerte que volvimos el domingo porque si llega a ser el lunes, no volvemos (¡a mis padres les ha pasado! ^^U).

Realmente es una lastima que hiciese tan mal tiempo (no paro ni un minuto de llover), pero ha valido la pena hacer este viaje. ¡Me ha encantado Madrid! ¡Tengo que volver algún día para seguir visitándolo con mas calma!