martes, 3 de febrero de 2009

Penúltima visita al veterinario


Si las cosas van bien o mal, ésta es la penúltima visita al veterinario. Kero vuelve a tener líquido en el estómago (mala señal), pero no tiene fiebre (buena señal). El veterinario cree que no quiere comer porque tiene líquido en el estómago. Así que quitándoselo espera que hoy o mañana se decida a probar bocado. Aparte no es buena señal que no quiera aceptar la medicación por vía oral (creo que el gato empieza a sentir un odio hacia mi persona cada vez que me ve con la jeringa...). Así que... ¡se tendrá que hacer pinchando! No creo ser capaz de pincharlo pero no me queda remedio. Cuando lo vaya a buscar dentro de dos horas, el señor veterinario me enseñara como hacerlo.

Mi madre está destrozada. No tiene fuerzas. Creo que me tocara a mí sola ir a sacrificarlo.

Esta mañana he vuelto a marearme y por poco me caigo al suelo. Creo que me ha bajado mucho la tensión  Apenas consigo dormir unas 6 horas.

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